miércoles, 11 de agosto de 2010

Descontrol “electoral”

La campaña de los candidatos se calienta cada día más. La propaganda proselitista invadió todos los sectores y a través de casi todos los medios, un gasto millonario de los pretendientes a un cargo edil o regional.

Los partidos lanzaron su aparto de campaña e impregnaron su propaganda con pintas, gigantografías, letreros, avisos, además de volantes, afiches y anuncios en diferentes medios de comunicación de toda la región.

Un gran despliegue propagandístico que demanda una importante inversión. Se observa que gastan grandes cantidades económicas. La campaña electoral está plagada de una millonaria “inversión”.

Parece que la idea de la mayoría de candidatos es que “a más gastos propagandísticos, mejores posibilidades de ganar las elecciones”.

Pero, no solo es la propaganda la que les genera gastos a los candidatos, también se observa los viajes del equipo de campaña, movilización de vehículos para el trabajo proselitista y los regalitos para los electores.

Los candidatos que mayor dinero gastan son -principalmente- los que postulan a la reelección o representan a los partidos que están en el poder local, regional o nacional y aquellos vinculados con actos de corrupción.

Los candidatos con denuncias por corrupción en la administración pública como autoridades o funcionarios de confianza y quienes están ligados con gobiernos corruptos, son quienes encabezan los gastos proselitistas.

Es sorprendente el despilfarro económico de estos sinvergüenzas, a quienes se les comprobó y -en algunos casos- sentenció por corruptos, quieran ganar las elecciones gastando -sin control- el dinero que nos robaron a todos los peruanos.

Ante este descontrol y despilfarro nadie hace nada. Simples anuncios de control, pero todo se queda en la intención, sin ninguna acción y menos sanción.

La Contraloría General de la República anunció una campaña para fiscalizar e impedir que se utilicen los recursos y bienes del estado en campañas proselitistas, pero hasta la fecha no hay ningún resultado.

A pesar de existir varias denuncias de corrupción con la utilización de recursos y bienes de las instituciones en las campañas de algunos reeleccionistas o para candidatos allegados a los partidos del poder, no se hace nada.

La ley exige que los partidos y movimientos políticos informen sobre sus ingresos y gastos, pero en la región Cajamarca, ningún candidato nos dice cuáles son las cifras que se mueven en su campaña.

Sería bueno que todos los partidos informen cuánto recibieron, quiénes aportaron para su campaña y cuánto gastan en su propaganda, movilización de equipo de trabajo, regalitos electoreros y demás “gastitos”.

El Jurado Nacional de Elecciones, la Onpe y demás autoridades deberían fiscalizar y controlar el movimiento económico que se genera en esta campaña, ya que muy bien podría infiltrarse dinero de la corrupción o de actividades ilícitas.

Si los candidatos son honestos y transparentes, que nos digan cuando reciben y cuanto gastan y no se sumen a este descontrol “electoral”.


No hay comentarios:

Publicar un comentario