Coco Cabanillas

Politiqueros al por mayor

La campaña electoral avanza y aparece el “calateo” de los candidatos. Unos por voluntad propia y a otros se les descubren todas sus “mañas y artimañas”; así como sus delitos y “pecadillos”.

Hay de todo en esta jungla politiquera, desde simplones e inexpertos aspirantes a políticos hasta expertos y avezados delincuentes que quieren asaltar las comunas de nuestra región.

Claro que también encontramos a políticos responsables, preparados y comprometidos con la sociedad.

Revisando las hojas de vida y escuchando a muchos ciudadanos, encontramos candidatos que aparecen en esta justa electoral solo para perder tiempo y dinero.

No tienen la más mínima opción de llegar a una alcaldía o regiduría.

Estos simplones, tontos e inexpertos esperan un “golpe de suerte” para ganar o simplemente quieren aparecer en un proceso para jactarse ante sus hijos y nietos que -en alguna oportunidad- fueron candidatos.

También encontramos a los “relajados”; aquellos personajes que son los “vagos del pueblo”, los borrachitos de la esquina, los “buenos para nada” o cualquier otro tipo “sin oficio ni beneficio”, quienes fueron incluidos para completar la lista o porque se colaron en algún partido.

Además aparecen los sinvergüenzas, irresponsables y comodines. Aquí encontramos a quienes niegan a sus hijos o no les pasan pensión y los abandonan a su suerte, a quienes dejan su trabajo para ir de parranda y a los que no tienen “bandera” y se pasan de partido en partido. Hay muchos en nuestra región.

Los sinvergüenzas prefieren un par de cervezas, antes que pasar la pensión a sus hijos. Si no cumplen con su función de padres, menos cumplirán con su trabajo cuando lleguen a una municipalidad.

Si hoy abandonan de hambre a sus hijos, con seguridad que dejarán sin proyectos, sin trabajo y sin obras a la población de su jurisdicción.

Luego están los “vivazos” de la política. Aquellos que están “con Dios y con el diablo” para recibir recursos y ganar adeptos. No les importa nada, el único objetivo es conseguir dinero y ganar las elecciones.

Estos facinerosos negocian con empresarios, comerciantes, dirigentes y ponen al servicio de ellos el futuro cargo que ganarían en el proceso electoral. Unos verdaderos “paladines de la picardía”.

Pero, quienes se llevan la corona son los delincuentes -probados y comprobados- que postulan en este proceso electoral. Hay varios que se identifican en sus hojas de vida publicadas en la página web del JNE.

Otros no señalan que son delincuentes, pues no indicaron las sentencias que pesan en su contra.

Delincuentes “de terno y corbata” que mueven una enorme maquinaria proselitista para ganar las elecciones y luego asaltar las arcas de las comunas a las que lleguen.

Aquí encontramos a una banda de facinerosos que tiene orquestada su campaña proselitista y -cual pirañitas- acechan a las comunas desde este momento esperando dar el golpe en las elecciones del 03 de octubre.